A diez años de su desaparición física, no se ha realizado
su registro de defunción por lo que figura hasta en el Padrón Electoral de
República Dominicana
Un octagenerio Joaquín Balaguer gobernaba el país, pese a
su edad y su ceguera
“La Constitución es un pedazo de papel”, fue una de las
frases célebres del político alemán de origen judío Ferdinand Lassalle, la cual
acuñó y se atribuyó Joaquín Balaguer Ricardo, el segundo hombre que ha
gobernado a República Dominicana por más tiempo y que se dio el lujo de
pisotear las leyes, reglamentos y normas a su antojo, incluso, de imponer su
propio estilo de política exterior en tiempos de la Guerra Fría, al no asistir
a ningún cónclave internacional.
Joaquín Balaguer Ricardo vivió y gobernó como quiso. Nunca
se casó ni reconoció a ninguno de los seis o siete hijos que se le imputan. De
forma contradictoria a los vástagos que se le señalan, entendió que un hombre
de Estado, como un monje asceta, debe estar dedicado a la administración de la
cosa pública a tiempo completo. Gobernó los primeros doce años (1966-1978) con
el apoyo de los gobiernos de Estados Unidos e impuso un régimen de terror y de
autoritarismo que no sólo se limitó a los 48 mil kilómetros cuadrados del
territorio nacional, sino que blandió un estilo propio de política exterior que
sumió al país en el aislacionismo político.
Durante su segundo período de gobierno (1986-1996) gobernó
con un estilo diferente en lo referente al respeto a los derechos humanos,
aunque su gestión –al final- quedó marcada por la desaparición física del
profesor universitario y activista cultural Narciso González (“Narcisazo”),
como estuvo marcada su gestión de Los Doce Años por las torturas, asesinatos y
desapariciones de líderes políticos opositores, en especial, el asesinato del
periodista Orlando Martínez, a quien le dedicó una “página en blanco” en su
libro Memorias de un Cortesano de la Era de Trujillo (1988). Fue un hombre que
se ufanó de burlarse de la Constitución, las leyes y la justicia dominicanas.
Se atribuyó los tres poderes del Estado, cuando en el 28
de mayo de 1968, declaró públicamente que el preso político José Ignacio Marte
Polanco –acusado de espiar para el gobierno cubano- no saldría de la cárcel
bajo ningún tecnicismo legal mientras él fuera presidente. Como también se lavó
las manos cuando atribuyó las torturas, asesinatos y desapariciones de Los Doce
Años a “fuerzas incontrolables” que operaban durante su mandato. En un
determinado momento ejercía todo el Poder y control y en otro era un simple
espectador, dependía del contexto.
Cuando abandonó forzosamente el Poder en 1996, no dejó de
gobernar o decidir. Su apoyo a la candidatura de Leonel Fernández Reyna (PLD)
en 1996 fue clave para que el joven profesor universitario alcanzara la
Presidencia de la República, como fue determinante su No a Danilo Medina el 17
de mayo de 2000 para un reconteo de los votos que le permitieran alzarse con el
Poder, permitiendo así el ascenso al gobierno del candidato del PRD, Hipólito
Mejía. Los tres últimos presidentes dominicanos (Fernández, Mejía y Medina) se
enorgullecen de haber bebido de su manantial de conocimiento político y de
haber contado, en alguna coyuntura política, con su apoyo, excepto el actual
presidente Danilo Medina.
En la primavera del año 2000 fue su última función en la
escena política dominicana, cuando el 15 de enero, con 92 años “aceptó” la
candidatura presidencial por su partido, el PRSC, sin embargo, ya el declive
del partido colorao empezaba a avizorarse. Para las elecciones congresuales y
municipales de 2002 había abandonado los mítines en donde arengaba con su
popular frase: “Compatriotas, a paso de vencedores”.
Murió “¿en la paz del Señor?”, el 14 de julio de 2002, en
la Clínica Abreu de la avenida Independencia, en el Distrito Nacional, tras
múltiples rumores de fallecimientos previos, de momificación, crío congelación,
etcétera.
Sin embargo, hasta muerto, él siempre estuvo por encima de
la Ley. Ningún mortal dominicano puede recibir cristiana sepultura sin un
registro de defunción, pero con Joaquín Balaguer esto habría sucedido. Es por
ello que a más de diez años de su desaparición física, es en los actuales
momentos cuando se gestiona una declaración tardía de defunción de Joaquín
Antonio Balaguer Ricardo, solicitada por Héctor Núñez Mota, representante de la
Fundación Joaquín Balaguer y de la Universidad Católica Tecnológica del Cibao
(Ucateci).
La “inmortalidad” de Joaquín Balaguer –al estilo de Joseph
Cartaphilus de Borges- habría continuado desapercibida en la sociedad
dominicana, si no fuera porque un asunto de intereses económicos ha destapado
el tema. Héctor Núñez Mota, actuando en representación de las instituciones
antes citadas se tomó la molestia de solicitar a la Junta Central Electoral (JCE)
el registro de declaración de defunción tardía de Balaguer para hacer efectiva
la donación de unos terrenos que en vida hizo el ex presidente a la Ucateci.
Balaguer se caracterizó por ser prolijo con la burguesía
dominicana, donó terrenos a un grupo de oligarcas de La Vega que construyeron
la Ucateci, donó su biblioteca personal a la UNPHU, también su casa de la
avenida Máximo Gómez hoy la comparten la Liga Dominicana contra el Cáncer y la
fundación que lleva su nombre. A la Universidad Autónoma de Santo Domingo
(UASD), que lo expulsó como catedrático de derecho y le negó la posibilidad de
un honoris causa, nunca le donó ni una historieta de Condorito.
Aunque Joaquín Balaguer hizo estas donaciones de buena fe,
no tienen validez jurídica en el entendido de que algunas de ellas sólo se
hacían efectivas al momento de su muerte y, como su defunción no fue asentada
en los Registros del Estado Civil, las donaciones de inmuebles no se han
materializado, y, además, podría surgir cualquier “vivo”, alegando derechos
sobre estos bienes.
Sólo por esto, Joaquín Balaguer -diez años después de su
muerte- terminará sus días como cualquier mortal dominicano: Tres metros bajo y
tierra y con el sello de FALLECIDO.
Datos generales de Joaquín Balaguer Ricardo
Nombre:
Joaquín Antonio
Apellidos: Balaguer Ricardo
Fecha de nacimiento: 1-9-1907
Lugar de nacimiento: Navarrete
Estado civil: Soltero
Sexo: Masculino
Piel: Blanco
Categoría: Mayor de edad
Cédula: 001-0068331-7
Apellidos: Balaguer Ricardo
Fecha de nacimiento: 1-9-1907
Lugar de nacimiento: Navarrete
Estado civil: Soltero
Sexo: Masculino
Piel: Blanco
Categoría: Mayor de edad
Cédula: 001-0068331-7
Por:
Patricia Báez Martínez/Z101
No hay comentarios:
Publicar un comentario